Venta, Casa rústica, Bunyola

En el corazón de la Sierra de Tramuntana, en el término de Bunyola y a tan sólo 10 minutos de Palma, Marratxí y Santa Maria, se encuentra esta finca rústica en un enclave único para disfrutar de la naturaleza y del encanto de la isla, con vistas despejadas a las montañas y total privacidad, esta propiedad representa una oportunidad única para quienes valoran la tranquilidad sin renunciar a una excelente conexión con la ciudad.  

Sobre un terreno de unos 10.000 m², ideal para desarrollar proyectos agrícolas, ecuestres o simplemente disfrutar de un estilo de vida en contacto con la naturaleza se alza esta casa de estilo mallorquín con mucho carácter junto a una casa de invitados independiente. Sus 640 m² construidos (430 útiles) combinan la arquitectura tradicional –arcos de marés, teja árabe, gruesos muros con gran capacidad de aislamiento– con espacios amplios y luminosos. La planta baja acoge un elegante recibidor, un impresionante salón-comedor con techos altos, chimenea y grandes ventanales con salida al porche, además de una cocina independiente con coladuría y un dormitorio con vestidor y baño en suite. 

En la primera planta, tres dormitorios con vestidores y baño en suite con acceso a terrazas privadas ofrecen unas vistas impresionantes, mientras que en la última planta se disfruta de una terraza con panorámicas de la sierra. El sótano alberga un garaje para cuatro vehículos y un espacio polivalente perfecto para gimnasio, bodega o estudio. Toda la vivienda cuenta con suelo radiante frío/calor, lo que garantiza confort durante todo el año. La propiedad cuenta además con piscina y amplias zonas ajardinadas para disfrutar del clima mediterraneo en plena naturaleza. 

A unos metros de la casa principal se encuentra una encantadora casa de invitados de unos 120 m², construida en el siglo XIX, que conserva las vigas vistas originales y destaca por su autenticidad y sostenibilidad, gracias a un sistema de recogida de agua mediante aljibe. 

Aunque la propiedad requiere una actualización, su solidez constructiva, ubicación privilegiada y gran potencial la convierten en una inversión extraordinaria. Una finca con alma, que espera ser transformada en el hogar de quien busque autenticidad, espacio y calidad de vida en uno de los entornos más bellos de Mallorca.