Venta, Casa rústica, Algaida

No es simplemente una casa, es un estilo de vida. Sabemos que los espacios en los que vivimos tienen un impacto directo en nuestra salud. Esta casa ha sido diseñada para tener un efecto positivo en su bienestar. En esta hermosa finca rústica de piedra natural, se siente una energía especial. Está situada a solo 15 minutos de Palma y es de fácil acceso por una carretera bien acondicionada.

En una parcela de aproximadamente 39.000 m2, esta propiedad combina la arquitectura tradicional mallorquina con elementos modernos y contemporáneos. La propiedad, orientada al sur, ofrece una vista espectacular de la montaña Randa y está enclavada en un entorno pintoresco que crea una simbiosis perfecta entre la naturaleza y el estilo de vida moderno. En 2016, la casa fue completamente renovada por un arquitecto de renombre, destacándose por su equipamiento de alta calidad y su elegancia atemporal. La combinación de las piedras de Marés, de más de 200 años, con los espacios contemporáneos hace de esta casa una obra donde pasado y presente se unen en una armonía insuperable con la naturaleza.

El interior de la finca convence por una exitosa mezcla de construcción tradicional y acentos modernos. En la planta baja se encuentran tres amplios dormitorios, cada uno con su propio baño en suite. En la planta superior se encuentra el espacioso dormitorio principal, complementado por dos baños y dos amplias terrazas que ofrecen vistas impresionantes. El gran salón-comedor en la planta baja integra una cocina abierta con isla que ofrece vistas al parque circundante. Esta combinación de equipamiento de alta calidad y elegancia atemporal hace de esta propiedad una verdadera joya.

La finca también incluye una casa de invitados con su propia piscina, cocina, sala de estar, dos dormitorios y dos baños. Otra casa de invitados o una sala de yoga también es posible; la construcción ya ha comenzado y su finalización depende del comprador.

Los edificios están climatizados, lo que garantiza temperaturas agradables incluso en días más fríos. Una chimenea crea una atmósfera acogedora adicional. La energía se suministra a través de la red eléctrica de la ciudad.

El exterior invita a relajarse con una gran terraza cubierta. El jardín bellamente diseñado se extiende sobre la vasta propiedad e incluye un huerto orgánico, un jardín frutal orgánico y una producción de aceite de oliva. Dos piscinas de agua salada proporcionan un refrescante alivio en los calurosos días de verano, mientras que un sendero para correr ofrece la posibilidad de disfrutar plenamente del paisaje pintoresco. También se dispone de una licencia agrícola y un pozo.

Es, sin duda, una casa con alma, que no deja nada que desear y que impresiona por su ubicación idílica, su jardín bellamente diseñado y su proximidad a Palma, al aeropuerto y a escuelas internacionales. Vivir en una casa que promueve su bienestar es elegir una vida consciente y plena.
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